Texto: Pablo Luque
Fotografía: Diego Durden
Inmersos como estamos en la temporada de festivales, donde los carteles no suelen brillar por su variedad estilística, un concierto con dos propuestas tan diferentes es muy agradable y enriquecedor. Es la oportunidad perfecta para descubrir bandas que probablemente nunca escucharías en otro contexto. El proyecto España abraza Brasil es una iniciativa de SON Estrella Galicia que, desde hace unos años, pretende fomentar el intercambio musical entre los dos lados del Atlántico. Esta vez los elegidos eran nuestros Modelo de respuesta polar y los brasileños Liniker e os caramelows.
Al filo de las diez de la noche, Liniker y los suyos hicieron acto de presencia en el escenario de El Sol de Madrid, lugar elegido para este trueque sonoro. Batería, guitarra, bajo, teclados, saxofón, trompeta y corista: siete músicos arropaban a Liniker, una cantante que ha experimentado un ascenso meteórico (la banda se formó hace menos de dos años) y que tiene una voz poderosa y personal con muchas influencias del soul estadounidense.
Comenzaron fuerte con “Remonta”, canción que da título a su disco, con la que se metieron al público en el bolsillo desde el primer segundo. Mucho groove y mucho buen rollo que siguió con su mayor hit, “Zero”, tema del que la gente se sabía la letra de principio a fin. No sería descabellado afirmar que al menos el cincuenta por ciento del público era carioca: entre canción y canción la gente gritaba palabras de apoyo a Liniker y cuando esta preguntó cuántos compatriotas había en la sala se vieron muchísimas manos levantadas.
El ritmo de este joven combo era contagioso, todos saltaban y el suelo temblaba, España bailaba con Brasil, y viceversa. Los músicos demostraban un nivel muy alto, respaldaban a la perfección la potente voz de Liniker y pasaban por diversos estilos dentro de cada canción: música negra, R&B, toques de psicodelia…Por momentos parecían una mezcla entre una big band y un conjunto de rock progresivo. Un derroche de energía y de actitud que se hizo corto.
Envuelta en una bandera arcoíris, Liniker se despidió con un alegato espontáneo a favor de la comunidad LGTBIQ, dejando un mensaje comprometido y unos oídos satisfechos con una propuesta musical muy a tener en cuenta en el futuro. Serán grandes.
Modelo de respuesta polar tenían un papel complicado después de la energética puesta en escena de Liniker e os caramelows, pero su pop luminoso no se quedó atrás a pesar de tener poco o nada en común con los brasileños. Borja Mompó, líder de los valencianos, se mostraba entusiasmado de poder volver a El Sol después de un año en el que han cambiado mucho las cosas, para bien. Su disco “Dos amigos”, financiado a través de un crowdfunding (al igual que el disco de Liniker, por cierto) les ha hecho subir varios peldaños en la escena indie nacional.
Con tres guitarras y una base rítmica muy contundente, Modelo de respuesta polar se desempeñaron con una fuerza sorprendente y una riqueza de detalles en los arreglos que eleva las letras de Mompó y las hace más grandiosas. Los pedales de trémolo estaban a tope en “La juventud y el tiempo”, y los de reverb en “Umo”: las cristalinas capas de guitarra marcan la diferencia en estas canciones y arrojan luz sobre unas melodías vocales melancólicas. El balance es perfecto en canciones que van creciendo como “Miedo” o las finales “Que no se apague” y “La guerra y las faltas”, con la que cerraron el concierto creando un muro de sonido y acoples muy potente al que se sumaba un enérgico batería que no rompió el parche de la caja de puro milagro. MDRP sorprenden mucho en directo y es normal que sea en este entorno donde estén ganando cada vez más seguidores. Dentro de poco entran a grabar nuevo disco y sin duda irán a más.
Modelo de respuesta polar y Liniker e os caramelows grabarán un single conjunto para SON Records y volverán a tocar en Sao Paulo después en otoño. El encuentro se producirá de nuevo al otro lado del Atlántico y España y Brasil volverán a abrazarse y a demostrar que la música es la mejor herramienta de intercambio cultural.