LA HABITACIÓN ROJA, EL CAMINO SE HACE AL ANDAR, por Alejandro Mosteiro
Tras despachar un intenso día como padre, descuelga el teléfono desde Noruega para hablar ahora como cantante de La Habitación Roja. Al aparato, Jorge Martí.
Un servidor, que es seguidor de largo recorrido, se quedó “ojiplático” con YouGotta a BeeCool.
Se trataba de jugar a ser otro grupo. Si no hubiéramos puesto la frase en inglés no habría chocado tanto. No suena a LHR clásica, pero me parece buena. Me gustan las melodías y la letra, es fresca, bailable… Hay gente que la odia y a otra le encanta. Mola arriesgar y ahí está, es la más escuchada del disco.
«24 de marzo» tiene toda la pinta de que resistirá los envites del tiempo.
Llegará a ser un clásico. Estoy seguro de que dentro de diez o treinta años se reivindicará y la gente la escuchará. Es un tema que llega, que toca.
No es un secreto, «Volverás a brillar» está entre las mimadas del disco.
Es muy especial para mí. Se la dedico a mi mujer porque es una gran luchadora. Es una canción redentora, que habla del poder del amor para superar los momentos bajos. Cuando la escucho pienso que es imposible que nos vaya mal con un tema así.
Te gustan mucho The Smiths. Últimamente se te ve muy Morrissey sobre el escenario.
Me ha costado quince años estar cómodo en el escenario sin tener la guitarra entre las manos. No es tanto emular a mis ídolos, sino tener confianza ciega en lo que hago.
“La vida se nos pasa persiguiendo nuestro momento”, dices. ¿Es este el de LHR?
No renunciamos al pasado, pero reivindicamos el presente, que siempre ha sido el mejor momento del grupo. Aunque también ha habido épocas malas.
¿Cuáles?
El momento más crítico fue después de Radio. Hubo esfuerzos por llevar el grupo a otro escalafón y no llegamos a conseguirlo. Las expectativas siempre fueron mayores que los logros, eso nos hizo estar frustrados a pesar de que nos iba mejor que al 90% de los grupos.
Quizá esa fue la clave del éxito, no obsesionarse con conseguirlo.
Sí, eso y valorar lo que teníamos. El disfrutar del camino y no de las metas. La ilusión es de lo mejor que tenemos como banda.
