La segunda jornada del Portamérica 2015 llegaba cargada de promesas: un cartel lleno de grandes hitos, un sol radiante y el público entregado. Todos los ingredientes para convertir la noche del viernes en un éxito.
Neuman fueron los encargados de arrancar el escenario SON Estrella Galicia en esta segunda jornada.
Los murcianos, capitaneados por Paco Román, llevan más de 15 años llenando de rock los escenarios de salas y festivales de España, y su paso por el PortAmérica era uno de los directos más esperados.
Su extensa trayectoria les ha permitido beber de fuentes muy diferentes y modelar su estilo propio consiguiendo finalmente un sonido post-rock altamente recomendable.
La banda descubrió pronto que el público respondía entusiasmado y se explayó en las intros y en los cierres instrumentales de unos temas que navegan entre la intimidad y el desapego, con guitarras llenas de fuerza y una batería en estado de gracia.
Terminado el directo de Neuman llegó el turno de Eladio y los seres queridos, que llenaron el escenario de temas íntimos y sensibles, incluso aquellos que cargan de sentido actual y políticos, como «Los dinosaurios«. Un lujo de directo que interpreta una banda veterana y fresca con disco recién estrenado, su tercer Lp titulado «Orden Invisible».
Desgranan poco a poco grandes temas de su trayectoria, incluyendo «están ustedes unidos», single que da título a su segundo Lp.
Eladio y los Seres Queridos ganan enteros en un directo que consigue comerse la luz del sol y convencer al público de que la noche, propicia para la distorsión, las guitarras potentes y la fuerza de las baterías sin tregua, ha llegado ya.
Pide Eladio ayuda para los coros en su quinto tema: «lalalalalala» anuncia. Y el público corea emocionado «Bella Durmiente«.
Y como gran sorpresa de la noche la banda presenta a un miembro efímero para acometer «Miss Europa«: el chef Pepe Solla, que demuestra tanto talento como entrega mientras el público corea emocionado un tema que se ha convertido en una auténtica reivindicación marca de la casa.
La noche seguía en marcha y el crescendo prometía. El momento en el que Calle 13 salta al escenario se convierte en una locura entre el público. La multitud se agolpa ya en los primeros acordes, antes incluso de que los portorriqueños se asomen.
Y es que estos chicos han conseguido convertirse en un referente con sus letras ácidas y reivindicativas y su ritmo lleno de fusiones aparentemente imposibles: rap, ska, rock, reggae, pop… Con un poco de todo y un mucho de estilo personal han logrado saltar barreras y hacerse únicos.
Se suben al Escenario SON de PortAmerica con su «Fiesta de locos» y efectivamente desatan la locura, especialmente en unas primeras filas entregadas completamente.
Con una gran carga reivindicativa en sus letras -«El Aguante» llegó precedida de un alegato ante ley mordaza aplaudido hasta la extenuación por los presentes- tampoco dejaron de lado el romanticismo con temas como «Nadie como tú«. Y todo, reivindicación social y romanticismo, bañado de ese ritmo irresistible que firman como propio e irrebatible.
Los alegatos de Residente presentando «Multiviral» convencen y llenan de energía la noche, y con este ritmo imparable entran en la recta final de su directo.
Los siguientes protagonistas lograban hoy, por fin, sacarse una dolorosa espinita. Al igual que Niños Mutantes, Vetusta Morla se sube al escenario con ganas de desquitarse tras la cancelación del año pasado. Y lo consiguen.
El público les espera con ansia coreando los temas antes incluso de que la banda salte al directo, y su entrada con «La Deriva» se convierte en una auténtica apoteosis.
Los primeros acordes de «Golpe Maestro» convierten PortAmérica en un clamor. Es ya indiscutible que Vetusta era uno de los grandes platos gourmet de la jornada y el público quiere ración doble.
Y es que la particular voz de su cantante, sus letras poéticas y reivindicativas, capaces de hablar de amores perdidos y revoluciones sociales con la misma intensidad, y su fuerza en los arreglos y las melodías convierten las creaciones de la banda en clásicos contemporáneos capaces de convertir al más escéptico, máxime cuando el directo es una pequeña obra maestra.
Con “Un Día en el Mundo” logran convertir el recinto en un enorme coro, sin esfuerzo aparente, simplemente dando pie, Vetusta se hace con el control del directo.
La primera de las dos sesiones de Djs para cerrar el segundo día de PortAmérica corrió a cargo de Addictive TV, un dúo londinense experto en mezclar temas para cine y televisión que se encargaron de hacer vibrar la pista con su juego de imágenes de clásicos televisivos y cinematográficos y temas bailables que juegan con la electrónica, el pop y el rock.
Y con el respetable entregado ya al baile subía al escenario SON Estrella Galicia BFlecha, un compendio de poemas, sonidos electrónicos y ritmos bailables que alargó la noche hasta bien entrada la madrugada. Misión cumplida.